Verstappen prevalece en la carrera más loca del año en Qatar y Alonso pesca un séptimo puesto

Max Verstappen salió ganador de una carrera en el Gran Premio de Qatar, en la que no pudo salir desde la pole que se ganó en la pista, pero que recuperó en la primera curva adelantando a George Russell, cuarto. Charles Leclerc acabó segundo tras una catarata de infortunios con Lando Norris, perjudicado por una sanción de diez segundos que le arruinó cuando luchaba por el triunfo. Oscar Piastri completó el podio con un undercut al primer Mercedes, pero el duelo entre McLaren y Ferrari, que ahora se separan por 21 puntos, por el título de constructores, queda apretadísimo para la última cita del Mundial de Fórmula 1 en Abu Dabi.

Carlos Sainz y Fernando Alonso remontaron una posición –sexto y séptimo– tras varias sus posiciones durante toda la carrera, con más mérito del asturiano, que tuvo que sobreponerse hasta a cinco adelantamientos en contra. La sanción a Norris le hizo quedar décimo, viéndose favorecidos hasta nueve pilotos por esa decisión de la FIA. Pierre Gasly se defendió de los españoles para quedar quinto, Guanyu Zhou dio la sorpresa y se aupó al octavo puesto y Kevin Magnussen fue noveno después de un duelo alargado con Alex Albon.

Verstappen y Norris adelantaron a Russell y salieron ganadores de una salida accidentada que acabó con dos participantes de un plumazo. Esteban Ocon y Franco Colapinto decían adiós a la carrera de Qatar tras la primera curva por una maniobra incomprensible del de Alpine para llevarse por delante al argentino, arruinándole la prueba. El coche de seguridad salía en la vuelta inicial y Nico Hülkenberg se quedaba como superviviente de ese primer incidente, al igual que Albon de un golpetazo de Lance Stroll, que se cruzó sin motivo para poner en problemas al de Williams.

Una salida de Lewis Hamilton permitió a Alonso resistir en el octavo puesto pese a ser adelantado por Checo Pérez y a Sainz ganar una posición. Poco le sirvió la bandera amarilla al asturiano, ya que en la relanzada le superaron su mítico ex compañero de 2007, Yuki Tsunoda, Kevin Magnussen y Gasly para borrarle de la zona de puntos.

Alonso vuelve a salvar a Aston Martin

No había llegado ni la octava vuelta y a Aston Martin ya se le había vuelto el domingo negro. Por un lado, Alonso tenía un problema en su coche que manifestó por radio con un enfado descomunal y que le convertía en una tortuga en las rectas, mientras que a Stroll le caía una penalización de diez segundos por su maniobra con Albon. El monoplaza del canadiense no pudo seguir y era retirado en el décimo giro.

Alonso se desquitó recuperando una posición con un adelantamiento brutal a Tsunoda y Sainz poco a poco comenzaba a rodar más rápido que Leclerc llegado a la vuelta 20. El atractivo de la carrera se había acabado prácticamente en su ecuador, pero Fernando le puso picante sosteniendo a quien tenía la pole, Russell, tras su parada en boxes y facilitándole la vida a Piastri, que luchaba con el inglés por el podio.

La carrera cobró vida de nuevo con el desprendimiento del retrovisor de Albon, que frenó la gran mayoría de primeras paradas a la espera de una bandera amarilla que igualase condiciones. Y cuando todo el mundo pensaba que todo estaba visto para sentencia, dos pinchazos de rueda consecutivos de Hamilton y Sainz con dicho objeto aceleraron esos recambios y derivaron en el segundo coche de seguridad.

Verstappen gana y Norris ajusta el título de constructores

Aston Martin acertó con Alonso al colocarle para despiste del resto un juego de duros y cambiándolo inmediatamente por otro de medios, el único del top 10, para llegar más veloz al final de una prueba que se detuvo demasiado para lo insignificante que había sido el incidente del retrovisor. Por tercera vez, salía el coche de seguridad a pista en la vuelta 41 con otros dos abandonos de Checo y Hülkenberg por sendos trompos.

Y en lo más alto, Norris dio por fin algo de competencia a Verstappen con un intento de adelantamiento en la curva 1 que no logró de milagro con el Red Bull y el McLaren totalmente pegados. Pero al británico se le acabaron de golpe todas las esperanzas de victoria a 12 vueltas del final, con una sanción que le impuso la FIA de diez segundos que debía cumplir en boxes y que apretaba más todavía el Mundial de constructores (640-619).